Una veintena de estudiantes que están en proceso de práctica de las carreras de Pedagogía recibieron sus certificados, luego de un semestre en el que reflexionaron sobre género y diversidad sexual y sus implicancias en el aula.
Las profesoras que dictaron el diploma fueron Angélica Corrales Huenún, Rosse Marie Vallejos y Marcela Palma del Departamento de Ciencias de la Educación, además del docente Rodrigo Pulgar, del Departamento de Filosofía.
El objetivo fue incorporar a la formación docente un espacio de reflexión, sensibilización e implementación de una perspectiva de género en el ordenamiento curricular de la formación inicial docente.
La académica Angélica Corrales señaló que la motivación para hacer el diploma provino de su participación en una mesa de formación inicial docente organizada por el Ministerio de Educación. “Nos quedamos con la preocupación de cómo se incorporaba el tema de género en la formación; todavía estamos en proceso y en paralelo se desarrollan otros temas, como la ley de identidad de género”.
A través de este programa, aseguró, esperan haber entregado las herramientas a los y las participantes, para apoyar el desarrollo de esta temática en las salas de clases y comprender asuntos tales como la violencia de género, educación no sexista y el abordaje educativo de las problemáticas de género.
Las y los estudiantes presentaron sus trabajos finales, en los que realizaron una pequeña investigación en alguno de los temas estudiados. Es así como por ejemplo, Belén Cid, Úrsula Insulza y Sergio Cuevas revisaron tres textos escolares de establecimientos particulares, de primer ciclo en el área de matemática. Los resultados indicaron que si bien existe presencia similar de imágenes de niños y niñas, a estas se les representa en trabajos del área de servicios, como vendedoras o en tareas del hogar. Los niños, en tanto, se muestran ejerciendo profesiones como la Medicina.
“Otro análisis que hicimos fue sobre los sentimientos que denotaban las imágenes. El género femenino siempre estaba feliz, las mujeres nunca se mostraban aproblemadas, preocupadas, o incluso reflexivas frente a un problema matemático, sino que siempre mostrando estar felices en su entorno. Eso quiere representar que las mujeres no nos preocupamos por nada y siempre estamos felices”, señaló Belén Cid.
Fuente: Panorama UdeC