Carrera de Educación Básica celebran el Mes del Libro con el arte del Kamishibai en la Biblioteca Central

El pasado viernes 19, la Biblioteca Central de la Universidad de Concepción se llenó de color y magia con la actividad «Contando historias en kamishibai», organizada por la Dirección de Bibliotecas de la institución. En esta ocasión, la profesora Macarena Monroy junto con un grupo de estudiantes de la carrera de Educación Básica, se unieron para llevar a cabo una jornada especial en el marco del Mes del Libro de Bibliotecas UdeC.

El Kamishibai, un teatro de papel de origen japonés, se convirtió en el protagonista de la tarde, atrayendo la atención del segundo grado de la Escuela Santa Catalina de Siena de Concepción. Esta técnica, que utiliza láminas ilustradas para narrar cuentos, cautivó a los pequeños espectadores y los sumergió en un mundo de fantasía y aprendizaje.

Antes de adentrarse en la historia de «Bravo Rosina!», las estudiantes de Educación Básica organizaron diversas dinámicas para preparar a los niños y niñas, ayudándoles a concentrarse y a conectar con la narración que estaba por venir.

El cuento fue presentado por Enrique Burgos, quien a través del Kamishibai, transportó a los asistentes a un viaje lleno de emociones y enseñanzas. Tras la narración, se llevó a cabo una dinámica para asegurar la comprensión del relato, donde los pequeños pudieron expresar sus opiniones y reflexiones.

Como gesto de agradecimiento y cariño, la Biblioteca Central entregó obsequios a los estudiantes de la Escuela Santa Catalina de Siena, cerrando así una jornada llena de aprendizaje y diversión.

Carla Silva, Jefa de Circulación de la Biblioteca Central, compartió su satisfacción con respecto a la actividad, destacando el compromiso y la preparación de las estudiantes de Educación Básica, quienes lograron captar la atención y cautivar a los niños y niñas invitados.

Esta iniciativa no solo promueve el amor por la lectura y la narración, sino que también fortalece los lazos entre la universidad y la comunidad, fomentando el aprendizaje colaborativo y el enriquecimiento mutuo. Sin duda, una experiencia que deja huella en el corazón de quienes participaron.

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